domingo, 24 de enero de 2021

BIENVENIDOS AL PROYECTO DE SALUD

¡Somos lo que comemos! Me parece una afirmación idónea para estrenar este blog dedicado al Proyecto de Salud que comenzamos a desarrollar en el centro. Dentro de los pilares de un proyecto de salud no puede faltar, sin ninguna duda, la alimentación y nosotros así lo haremos ver. Tanto esta como las siguientes entradas al blog nos aportarán información sobre aspectos relacionados con la alimentación que nos ayudarán a responder preguntas como: ¿en qué consiste una alimentación saludable? ¿qué grupos de alimentos existen? ¿Cuáles son los más idóneos y con qué frecuencia debo consumirlos?... Iremos respondiendo a todas estas preguntas y más pero por el momento vamos a centrarnos en algo que nos atañe a todos en nuestro día a día en el centro ¿qué puedo llevar al cole para comer a media mañana y que además sea saludable? ¡al lio!.

La alimentación constituye la base de nuestra vida, es una de las variables que modifica nuestro ritmo de vida de forma intensa. La energía para cumplir las actividades diarias depende en gran medida de la forma de alimentarnos. También nuestra salud, que se resiente cuando la dieta es inadecuada y sufrimos falta de determinados nutrientes o exceso de los mismos. En niños y adolescentes, además, afectará no sólo a su salud actual, sino también a la salud futura que tendrán de adultos. Y por supuesto, la calidad nutricional de la dieta afectará a su desarrollo físico y mental, a su crecimiento y a su rendimiento escolar.

Por eso, desde los primeros años de vida es importante conocer y adquirir hábitos saludables, para evitar posibles enfermedades o prácticas negativas en la etapa adulta. Y desde el Colegio Marcos del Torniello queremos contribuir a que nuestro alumnado no solo conozca en qué consiste una alimentación saludable, sino que también la practique al menos en la comida de media mañana que todos realizan en el centro.



Desde el proyecto de salud, uno de los varios que desarrolla el centro, nos proponemos los siguientes objetivos:

- Conocer y llevar a cabo la comida saludable de media mañana.

- Reducir consumo de alimentos no saludables, así como de envases innecesarios, buscando opciones reutilizables y reciclables.

- Conocer y depositar los desperdicios en su papelera correspondiente.

Para conseguir los 2 primeros objetivos es donde necesitamos vuestra colaboración. Tras observar durante el primer trimestre el porcentaje de alumnado que trae comida para media mañana, así como el tipo de alimentos, hemos observado que en muchos casos puede ser mejorable, por lo que desde el centro queremos actuar y vamos a proponer varias opciones saludables para que todos los alumnos traigan alimentos similares o parecidos.

Los grupos de alimentos que hemos seleccionado son 4: frutos secos, lácteos desnatados, fruta y "bocadillo".

Frutos secos: La principal característica de los frutos secos es su alto contenido energético y su importante aporte de ácidos grasos insaturados (buenos), además, nos proporcionan un aporte de proteínas de origen vegetal. La medida idónea para comer a media mañana sería un puñado (de cada alumno o alumna en cuestión). En cuanto al tipo nos sirven todos, de hecho, en la variedad está la riqueza. Ejemplos de frutos secos: almendras, anacardos, avellanas, pistachos, nueces... Mejor las opciones al natural, o en su caso, los bajos en sal. (Intentar llevar pelados los que lo necesiten para facilitar su ingesta y para economizar el tiempo, ya que este año al no realizar esta comida a media mañana en el recreo "quita" tiempo real de clase).



Lácteos desnatados: Los lácteos, es decir, la leche y sus derivados (como los yogures) son una importante fuente de proteínas de elevada calidad. También son una excelente fuente de calcio, mineral importantísimo para la formación de huesos y dientes, así como para la prevención de enfermedades como la osteoporosis. Un lácteo que fácilmente podemos consumir a media mañana es un yogurt, bien en forma bebible (yogurt de beber) o el de cuchara de "toda la vida". Ahora en el mercado existen múltiples y económicas opciones de yogures bajos en grasas y sin azúcares añadidos (tipo los 0%) que son las opciones más recomendadas.

Fruta: Las frutas nos aportan agua, azúcares y vitaminas. Al igual que con los frutos secos, la clave está en variarlas para aprovechar las diferentes propiedades que nos ofrecen las mismas, ya que todas son saludables. A la hora de elegir, hay que intentar priorizar las de temporada. Resaltamos la importancia de que las frutas sean naturales, nada tiene que ver comer una pieza de fruta con beber un supuesto zumo o papilla de frutas por muy natural que nos lo vendan, en tal caso, exprimir nosotros mismos las frutas.



"Bocadillo": para que sea saludable es recomendable buscar un pan hecho con harina integral o de cereal, bien sea formato pan-pan, o pan de molde (tipo sándwich). En cuanto a su contenido, los fiambres más saludables por su alto contenido en proteínas, aunque algunos también en grasas, serían: jamón, jamón york, pavo, cecina, lomo y queso. Aquí, como con los yogures, repito, hay múltiples versiones bajas en calorías, en sal, en grasas... buscar la más económica y saludable. Importante adecuar el tamaño a la edad del niño/a, en muchas ocasiones son de más.

            


¿Cómo combinar estos 4 grupos de alimentos y con qué frecuencia a la semana comerlos?

Podemos hacer las combinaciones que queramos, pero solo de 2 grupos de alimentos, no más, de aquí la importancia de variar los alimentos de cada grupo. Ejemplo: una pieza de fruta + un puñado de frutos secos; un lácteo + una pieza de fruta; bocadillo + pieza de fruta...

En cuanto a la frecuencia de los alimentos por semana podría ser algo así:

Frutos secos: al menos 2-3 veces a la semana.

Lácteo: 2-3 días a la semana.

Fruta: su puede una pieza todos los días.

Bocadillo/sándwich: a poder ser no más de 2 días (intentar priorizar los otros 3 grupos de alimentos).

Aprovechando este tentempié de media mañana también queremos centrar nuestra atención en los envases y envoltorios que se llevan al colegio para intentar reducir los desperdicios y facilitar la reutilización y reciclado de nuestros envases.

Por un lado, hablamos del botellín o botella de agua, que ya traen muchos alumnos de por sí al centro y que aprovechamos para recomendar que sigan haciendo. En la actualidad hay cientos de formatos de botellas de agua que no son de plástico y son reutilizables, a la par que económicas. Por otro lado, los envases en los que se traigan los alimentos al centro, recomendamos que sean los tipo tuppers o similares, en los que se transporta de una manera fácil y segura los alimentos y se pueden lavar y reutilizar cómodamente, ofreciendo una alternativa mucho más sostenible que el clásico papel de aluminio, por ejemplo. Contribuyendo así a reducir basura y desperdicios.








 

PADLET